jueves, 25 de enero de 2018

Comentario: Mazinger Z Infinity

Go Nagai... haz lo que quieras...

Bueno, pues ahora vamos con un dibujo animado mítico para varias generaciones, con su enésimo ajuste o actualización. ¿Me gustó? Pues claro, es Mazinger Z. ¿Pero sin contar eso? Pues también.

Me sincero con vosotros: la continuidad me gusta, me gusta como el extra de queso, que cuando lo tengo no me quejo y lo pido siempre, pero si se me pasa no me pasa nada. Y es lo que ha pasado, que esta película tiene continuidad con la historia de Mazinger Z, con el antiguo anime claro. ¿Se pierde en la nostalgia sin más?. Pues no, tiene la sensación de ser un escalón en este universo con dioses alienígenas, monstruos mecánicos de civilizaciones pasadas y supervillanos, pero también crisis energéticas y utopías que se escurren entre los dedos. La madurez, ese dilema que es entre ser un dios o un monstruo, entre ser un adulto bueno y responsable o ser cruel e inmaduro, es lo que esta película transmite. También que esas dos posibilidades son apenas un resumen de las infinitas posibilidades que existen. Puedes hacer un montón de cosas con un robot gigante, en tu vida y en tus historias. Y Go Nagai ha hecho muchas cosas con Mazinger y con sus parientes.

Y muchas de ellas están representadas en Infinity. A veces son guiños como el retrato de un personaje por otra parte ausente o un pequeño chiste de fanservice, otras son  importantes para la historia y el gran autorretrato como es Great Mazinger con su piloto. Esta serie trata de la madurez, pero también de la imagen del futuro. Mazinger Z es bastante positiva, bastante optimista serie de ciencia ficción al fin y al cabo. Ahí tenemos a Koji Kabuto, ahora un científico como sus padre y su abuelo, y es su hermano Shiro quien es un piloto de robots gigantes. Koji encuentra algo más que un nuevo gigante de metal, ahora ha encontrado una IA biológica, Lisa, que es pese a ser una creación artificial del otros, parece conectar con sus dudas frente al futuro. Sayaka y él están en una ruptura en ciernes por la carencia de avance en su relación. Mientras la vida sigue avanzando... hasta que los monstruos de su pasado, el Doctor Infierno y sus huestes, toman el Mazinger Infinity y toda la energía fotónica. Pero Koji ya no es el adolescente heroico. ¿O no ha avanzado nada? ¿El mundo tampoco ha aprendido desde sus peleas con el Mazinger?.

Esta película es un regreso a la nostalgia muy consciente, no viene a contarnos que lo que sabemos  hemos vivido fue distinto, pero sí a recordarnos que el pasado puede inspirar, pero no ser vivido en bucle. Que hay cosas en el futuro. Y parte de eso lo hace con una chica de pelo corto y blanco creada por la ciencia para pilotar un robot gigante (pero mejor que Evangelion). Y nos lo tira a la cara esta idea de que el futuro es la forma de avanzar, que no hay blancos ni negros, pero que seguir adelante ayuda a hacer un mundo mejor.

Y sí, es Go Nagai, fanservice y robots gigantes vomitando sangre. Pero vamos que a vuestro amigo y ciber vecino Mario le gustó mucho.


(Y la canción primera y la final son cantadas por gente que conozco, de Go Busters y también de W)

2 comentarios: