miércoles, 10 de octubre de 2012

Cuéntame un cuento... porque una novela no se puede

Bueno, perdonad el título tan largo y pelín extraño (y homenaje musical). Hoy voy a compartir con vosotros algo que andaba pensando sobre los géneros formales dentro de la prosa narrativa, géneros formales, y no necesariamente históricos o de género temático, si no en la forma, o más bien duración que existen.
Relato, cuento y novela son géneros todos de la prosa que constituyen su discurso dentro de la ficción narrativa. Para empezar decir que lo que distingue a la última de los dos primeros es fundamentalmente la extensión. ¿Y qué diferencia el relato del cuento? Pues nada o todo, dependiendo de la escuela o el maestro que tengas: Cuento y relato pueden ser sinónimos, o diferenciarse desde la extensión (siendo el cuento más corto que el relato), estructura conservadora (similar a la novela) del cuento frente a una mayor libertad en el relato... Pero esto es una opinión de algunos teóricos. Para otros cuento y relato son intercambiables, o sólo extensión -o se prefiere el término francés de nouvelle para los relatos realmente largos o novelas muy cortas. A veces incluso podríamos decir que relato es sinónimo incluso de narración, y por lo tanto un tipo de comunicación o expresión que salta de la literatura hasta lo audiovisual, abarcando todo... ¡Por estas razones existen estudios de Letras!
Pero volviendo a las diferencias, yo diría que aun con estructuras similares (presentación, nudo y desenlace), la novela y los más breves tienen una diferencia. Un buen novelista debe en una de sus obras desarrollar: temas, personajes, escenas e historias. Puede que sólo tenga alguno de esos elementos, pero para ser novela debe lograr mantener la atención, durante "ese desarrollo", de sus lectores, e incluso puede dedicar a retomar y corregir en capítulos, errores de otros. Lo importante, por lo tanto es que pueda crear algo "extenso" con interés, ya sea con uno de manera notable o todos los aspectos con algo íntegro y consecuente en toda su extensión. Pero esto último es bastante difícil.
¿Y con los cortos? Si la novela desarrolla y puede tomar aire, e incluso dar aire al lector; a lo largo de toda su extensión, eso no es posible en el relato o cuento. Un buen cuento expone en su extensión lo que debe contar. Debe ser comprensible, consecuente y cohesionado en su extensión, y así exponer lo que quiera que tenga: ya sea una historia breve (apenas una escena de una película), una moraleja (especialidad del género de las fábulas) o un personaje. Debe jugar con la brevedad como arma y límite, y yo diría que tiene más calidad de narrador el escribir cuentos. Pero también tiene más dificultad como lector, no puede retomarse tan fácilmente y no pueden encontrarse puntos cardinales en la lectura como son los capítulos de una novela. Los prejuicios considerando el cuento como género sólo infantil o popular (lo que en nuestros estudios es dejarlos de lado de manera peyorativa) es estúpido.
Cuando estudiaba, un profesor nos contó de manera muy dramática lo extraño que era que el género menos literario a lo largo de la historia, la novela, sea ahora el epítome de lo que es la literatura. Que quien es novelista (escritor de novelas) sea sinónimo de escritor; mientras que dramaturgo, cuentista o poeta sean un poco por debajo o infravalorados en el imaginario colectivo. Yo no diría tanto, pero desde luego que para mí un buen escritor puede dedicarse a una sola rama de la literatura, pero un genio puede trepar o cambiar hacer esquejes de ramas de árboles incluso distintos. Merece la pena probar, pero no hay que lamentar caer en el intento.
Volviendo a como distinguir géneros, decir que es en lo más nuevo del siglo pasado donde se pueden distinguir géneros de prosa narrativos. ¿Si se convierte en una serie sin recortar? Novela. ¿Si se convierte en un largo pero concreto? Nouvelle o relato o novela breve. ¿Corto? Cuento. Decir también que hay que empezar a mirar desde la literatura y viceversa a los guiones cinematográficos y televisivos. Muchos lo hacen  ya fuera y desde luego quien los escribe está muy leída.
Y esto es todo por ahora de parte de vuestro amigo y ciber vecino Mario. ¡Pronto más cosas!

2 comentarios:

  1. Estoy en contra de clasificar algo que no tiene unida metrica oficial.

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  2. Ya, date cuenta de que yo no me termino de quedar. Y hay gente que clasifica sin importar la longitud si no su características de género - ficción siempre o no y tal.

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