Antonio
Medina, el Maestro Peregrino
Características:
Inteligencia +2,
Percepción 0,
Presencia +2,
Comunicación +2,
Fuerza -3,
Vitalidad +2,
Rapidez +1,
Destreza 0.
Tamaño:
0
Edad:
30
años
Decrepitud:
0
Informidad:
1(2)
Puntuación
de Confianza: 1(3)
Virtudes
y Defectos: El Don, Magus
Hermético; Afinidad
con Filosofía, Conocimiento
Arcano, Convocación
Elemental (Teúrgica),
Filosofía Elemental,
Magister in Artibus,
Trotamundos;
Brujo, Circunstancias
Adversas (bosques), Duro de
Oído, Mentor (antiguo maestro musulmán), Requerimientos
de Estudio, Restricción (sin libro en las manos).
Rasgos
de Personalidad: Colérico
+2, Flemático +2, Melancólico +2, Sanguíneo +2.
Reputaciones:
Brujo Elemental
3 (Hermético), Experto en
Filosofía 2 (Académica).
Combate:
Esquiva:
Iniciativa +1,
Ataque n/a,
Defensa +1,
Daño n/a.
Aguante:
+2 (Vitalidad, +4
Resistencia Elemental)
Niveles
de Fatiga: OK, 0, -1, -3, -5,
Inconsciente
Penalizaciones
por Heridas: -1 (1-5), -3
(6-10), -5 (11-15), Incapacitado (16-20), Muerto (21+)
Habilidades:
Árabe 5 (términos
académicos), Artes
Liberales 5
(gramática),
Atención 1 (buscar),
Castellano 5 (leonés),
Concentración 3
(Convocación),
Conocimiento de la Hermandad de la Pureza 2
(iniciaciones),
Conocimiento de la Orden de
Hermes 2 (Tribunal
de Roma),
Conocimiento de la Universidad de
Salamanca 2 (biblioteca),
Conocimiento Mágico 3
(elementales),
Derecho Hermético 2
(aprendices Ex Miscellanea),
Don de Gentes 3
(académicos),
Encanto 3 (académicos),
Enseñanza 3 (filosofía),
Filosofía 8*
(extraer Vis),
Latín 5 (uso
académico),
Parma Mágica 1
(Vim),
Penetración 3
(Convocación),
Profesión: Escriba
1 (textos propios),
Teología 1 (Génesis), Teología: Islam 1 (debates),
Teoría Mágica 3
(ayudar
en el laboratorio).
(*Afinidad).
Artes
Elementales: Adivinación n/a,
Control n/a,
Convocación 15,
Refinación
9,
Agua 4(F),
Aire 4(F),
Fuego 4(F),
Tierra 4(F).
(F-
Beneficiados de la Filosofía Elemental).
Marcas
Elementales: Su
sombra humea o se llena de condensación cada rato.
Equipo:
Ropas de erudito,
bolsa, libros de lectura
(incluida copia de ).
Carga:
0.
Vis:
1 peón de cada Forma de Vis
Aquam, Auram, Ignem y Terram
en cuatro viales.
Sigil:
Un amuleto con los símbolos de los cuatro elementos grabados.
Impronta:
Pequeñas cantidades de polvo y escarcha sobre sus ropas, o humo o
viento las mueven al usar
Formas de uno u otro
elemento.
Apariencia:
Antonio es un
hombre que empieza a dejar atrás la juventud, con el rostro y las
manos bastante más morenas para alguien que lleva ropas de erudito.
Su pelo castaño claro empieza a clarear en la coronilla, siempre
lleva un libro entre las manos.
No escucha bien, así que suele acercarse a la gente que le habla,
pero muchas veces parece estar pensando en sus cosas sin más
preocupaciones. Sus ojos
claros siempre están dirigidos a un libro o a un detalle de estudio.
Antonio
nació cerca de Salamanca, demostrando un talento inusitado para los
estudios y una mente muy afilada. Fue en
medio de sus estudios en Salamanca
que halló un
libro de hechizos extraño
en medio de la biblioteca.
Dicho libro era un libro de hechicería,
para invocar espíritus invisibles,
y sus intentos de aprender del libro provocaron que fuese acechado
por fantasmas y otras criaturas terribles;
llegando a intentar peregrinar a Santiago para curarse de dichos
males, pero camino se torció,
y no por casualidad.
Partiendo desde Salamanca
marchó al sur y no al norte, ya que
una serie de libros eruditos en árabe
que había estudiado,
en principio porque con
un primer vistazo no eran más que
sencillos ejercicios de Artes Liberales y Filosofía,
un libro en árabe pero con
guías de un arte similar al que le tentó en primer lugar.
Sus estudios para entender dicho libro, que sus tutores pensaron que
era sospechoso cuanto menos, le granjearon el apelativo de Medina,
por la ciudad en Arabia. Encontró al propietario original, quien le
tomó como aprendiz mediante correspondencia tras abrir su Don, y
enseñarle sus caminos de la
magia de los elementos,
convirtiendo al incipiente brujo en uno de los suyos,
aceptando incluso quemar su antiguo libro de hechicería.
Para su maestro, Avenaides
el alquimista, fue extraño
y escandaloso que su aprendiz aprendiera muy rápido conocimientos
que él había necesitado años aprender, pero parece que el
potencial de su estudiante no tenía límites. Por desgracia hubiese
sido un escándalo entre los suyos como este hombre infiel y poco
devoto pudiera llegar a
entender tales principios, casi por su cuenta. Avenaides decidió
recomendarle buscar a magos cristianos, y mantener la relación de
forma discreta. Antonio encontró entre los estudiantes a algunos
miembros de la Orden de Hermes y les pidió unirse,
aunque ya estaba bajo escrutinio de alguno de sus maestros.
Ya que su poder le impedía aprender su magia
hermética, aceptó de buen
grado unirse a los Ex Miscellanea, donde ahora participa
a pesar de su magia extraña y sospechosa.
Antonio
conserva la capacidad de invocar a espíritus y otros seres
sobrenaturales, pero solamente los considerados Elementales ahora,
además de a animales, materia y fenómenos naturales. Siempre
necesita un libro mágico (de sus aptitudes sobrenaturales o
conocimientos arcanos conocidos por él, leído o no,
o incluso escrito por su persona)
para poder usar su magia. Utiliza el segundo y tercer libros de las
Epístolas (Rasa'il
Ikhwan as-Safa'wa Khillan al-Wafa,
Libro Dos, Ciencias Naturales y Libro Tres, Ciencias Psicológicas y
Morales), que ya ha leído y releído. Durante sus estudios tuvo
acceso a todas las Epístolas, incluida las Epístolas Comprensivas.
Esto fue por efecto de una maldición de uno de los espíritus que le
atosigaron antes. Usando sus conocimientos sobre filosofía, y
observando a su maestro, despertó la capacidad de aprender de los
elementos a través de la ciencia. Dicho logro es raro, pero no
imposible, pero rompe las reglas de la Tradición de los Ikhwan
As-Safa', por eso se unió a la Orden. Su mentor no sabe el secreto
de la resistencia mágica, y también desconfía de que sus
conocimientos "poco convencionales" sean sabios de conocer,
así que guarda esto en secreto mientras mantiene una correspondencia
discreta con él. Desearía hacer como los Herméticos, y como
algunos practicantes de su arte pero en medicina, y poder dar a otros
una poción de longevidad, aunque aun no la ha tomado él mismo.
Entre sus pares, se prefieren sus textos académicos que a su
presencia dado su Don, pero gracias a sus traducciones y escritos,
mantiene su buena reputación. Cuando usa su Convocación, tarda
tiempo sobre todo si necesita contener lo convoque (usa tirada de
estrés + Vitalidad + Convocación + Forma + aura, y emplea un nivel
de Fatiga de Agotamiento), pero es siempre menos que con Refinación
(Inteligencia + Refinación + Forma + Filosofía + aura, una
estación), pudiendo crear una poción de longevidad para sí,
extraer Vis e incrementar o reducir el Poder Sobrenatural de otra
criatura (usando Conocimiento del Reino correspondiente, en su caso
Mágico, para elementales o Filosofía para animales mágicos).
Gracias a su Filosofía Elemental, cuando adquiere experiencia en
dicha habilidad, también lo hace en sus Formas, y puede usar la
puntuación mayor del elemento o Filosofía (si es menor esta
puntuación) en caso de tener requisitos de lanzamiento en su magia.
[Este personaje ha ido haciéndose poco a poco durante meses, con un cambio al final bastante gordo pero que le da mucho sentido. No es una de las tradiciones elementales de mi creación, si no una de las 3 planteadas en Hedge Magic revised edition. Más cosas pronto de parte de vuestro amigo y ciber vecino Mario.]