Comentario: Kamen Rider Hibiki

A ver como empiezo...

Buen, pues cuando escribo esto hace justo una semana que terminé de ver Kamen Rider Hibiki, una temporada de Kamen Rider muy diferente a todas las demás. No puedo decir que me arrepienta de haberla visto del todo, tiene cosas muy buenas... pero también malas.

El principio es extrañamente musical, muy musical. El tema de la música es recurrente en la serie, y además relevante porque la idea es que los oni (los riders de la temporada) usan música para combatir a los Makamou (monstruos que llevan tanto tiempo apareciendo que la serie deja intuir que son el origen de las historias de los youkai), usando cada Oni un tipo de instrumento diferente, con un estilo distinto pensado para combatir a diferentes tipos de monstruo. Los Makamou buscan en los lugares rurales presas humanas que devorar, pero en realidad hay una inteligencia detrás de dichos monstruos. Los Oni los combaten sin tregua, y es precisamente en uno de estos lugares que el protagonista de esta historia se encuentra tanto con los Makamou como con el Oni que le salva. Sí, la serie tiene un Oni/Kamen Rider protagonista, Hibiki; pero el protagonista es el chaval llamado Asumu, quien acaba de entrar en un muy buen instituto pero da los primeros pasos en su viaje a la madurez. Con la confianza que adquiere al conocer a Hibiki y al resto de Oni, así como a la familia que regenta una taberna (Tachibana es el nombre para la taberna y su apellido; y que forman parte del grupo llamado Takeshi que ayuda a los Oni), Asumu se hace mejor.

Y este es el resumen de la serie en su conjunto. Ahora que voy a ir contando cosas, he de decir que hay muchas cosas que me gustaron, otras que no me terminaron de convencer pero me parecen muy legítimas y otras cuantas que no hay por donde cogerlas. Esta serie, a poco que investigas o lees sobre ella te saltan los problemas de producción, entre recortes que obligan a reciclar cosas o dejar de usar escenarios naturales (exteriores muy chulos), que acaban con un conflicto entre la productora y el resto, incluso llegando al extremo de cambiar a muchos guionistas y la dirección. Decir que el cambio es muy estridente es ser suave. Como digo, al principio los visuales y la música son magníficos, evocadores de maravilla y terror; esa primera mitad tiene un lustre impresionante. Cuando dicho lustre desaparece, o bien deja de distraer o incluso reafirma otros defectos.

Hibiki (la serie) tiene diferencias muy rompedoras, por ejemplo los Oni se transforman sin necesidad del cinturón, su ropa se destruye y toda su tecnología refuerza unos poderes nacidos de un entrenamiento especial que les permite transformarse (literalmente, si caen inconscientes mientras están transformados acaban muchas veces desnudos porque su ropa se destruye). Otro gran concepto de la serie es el entrenamiento, Hibiki es especial porque está bien entrenado, básicamente es su coletilla; y es algo que intentan transmitir. Entrenamiento es en este contexto esfuerzo, formación y desarrollo, así que ya tenemos la parte de moraleja para los niños bien fuerte.

Ojalá eso sí, se hubiesen explayado más en otros detalles. Como digo la mirada de la serie por su mayor parte sigue a Asumu, el chaval normal que tiene sus conflictos cotidianos y fácilmente comprensibles por cualquiera. Pero nuestro protagonista es Hibiki, alguien que ha abandonado todo por el entrenamiento Oni, incluso su nombre normal. Así tenemos un protagonista sin apenas nada de vida clara, aunque en su entorno haya varios personajes, pero que todos ellos tienen relación con la caza de monstruos. Ah, sobre los monstruos, el origen y auténtica naturaleza de estos es apenas vislumbrado, siendo una serie más en la línea de varias de las anteriores series de Kamen Rider (y peor que 555, está al nivel de Agito o Kuuga), incluso un poco más que otras. Y hablando de cosas mal contadas, el final de la serie sucede tras un final al que hacen referencias... para que os hagáis una idea es como si Vengadores 4 empezase diciendo que ha pasado tiempo pero que todo está bien ya, pero sin contar como arreglaron lo que sucedió en la Guerra del Infinito.

No quiero caer en spoilers, pero creo que merece la pena avisar, que esta serie trata bastante mal a los personajes femeninos además, con dos momentos especialmente frustrantes y arquetípicos. El recorte de la serie hizo que esta, que era en principio otra serie con muchos Riders acabó sin ellos... y el último que añaden es la mayor parte del tiempo el personaje más odioso que he visto (aunque el actor es mucho mejor en Den-O). Detalle simpático, montón de actores de tokusatsu debutaron o empezaron a hacer estos papeles por esta serie, eso es bien.

Pero antes de despedirme os dejo el primer opening, el segundo lo encontraréis sin buscarlo:

(El ending aquí os lo dejo, que es majo igual)

Pronto más cosas de parte de vuestro amigo y ciber vecino Mario.